Los gestos de dolor de Felipe Loyola al abandonar el campo de juego encendieron las alarmas en Independiente. Fue a los 20 minutos del segundo tiempo, durante la derrota ante Belgrano por la Copa Argentina, cuando el mediocampista se retiró visiblemente molesto, quejándose de una dolencia en una de sus rodillas. La escena preocupó de inmediato al entrenador Julio Vaccari y a todo su cuerpo técnico, especialmente por la cercanía del clásico ante River y el primer duelo de octavos de final de la Copa Sudamericana frente a Universidad de Chile.

Sin embargo, el susto duró poco. Con el correr de los días, el dolor fue mermando y finalmente se confirmó que se trató de un traumatismo leve producto de un cruce en el partido disputado en el Gigante de Arroyito. El volante interno se entrenó este lunes a la par de sus compañeros en el predio de Villa Domínico y estará a disposición del técnico para el choque de este sábado, a las 18.30, en el Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini.

La recuperación de Loyola representa una buena noticia para Vaccari, ya que el jugador es una pieza clave en su esquema ideal. De no mediar inconvenientes, será titular en un partido que puede marcar el rumbo del equipo en el semestre. No obstante, la apretada agenda obliga al entrenador a evaluar alternativas: apenas cuatro días después del clásico, Independiente deberá viajar a Chile para disputar la ida del cruce copero ante la U.

Con este panorama, surgen las dudas: ¿rotará el entrenador para cuidar piernas? ¿Habrá cambios en el once inicial pese a contar con Loyola recuperado? Por ahora, el cuerpo técnico respira aliviado por la evolución del mediocampista. La decisión final llegará sobre el cierre de la semana, cuando Vaccari defina si apuesta todo al clásico o si empieza a dosificar esfuerzos de cara a un exigente mes de competencia.