Desde un balcón que da al corazón de la fábrica de Alpine de Fórmula 1 se puede apreciar el auto número 43 sin los neumáticos y puesto sobre unos caballetes. Está inmaculado. Ni una marca, ni una mancha. El motivo es doloroso: Franco Colapinto nunca pudo arrancar la carrera por un presunto problema en la caja de cambios y el GP de Gran Bretaña se terminó para el argentino sin haber empezado.

Un día después de la carrera, Clarín pudo visitar la fábrica de Enstone, muy cerca de Silverstone, en donde se desarrollan, fabrican y preparan los autos de la escudería francesa para correr en la máxima categoría. Y ahí se encontraba el A525 que solo pudo hacer la vuelta previa y nada más.

“Necesitamos averiguar qué sucedió exactamente y esa es una de las razones por las que trajimos el auto completo para poder desmontarlo aquí”, comentó Ciaron Pilbeam, director técnico de performance del equipo.

“No es frecuente tener un auto completo en la fábrica. Normalmente los construimos los martes y miércoles en una semana de carrera y los desmontamos los domingos por la noche. Es inusual tener un auto completo aquí”, resaltó el ingeniero mientras un operario escaneaba la superficie del auto de Colapinto.

El argentino vio frustrada su posibilidad de avanzar en un Gran Premio que dio oportunidades para muchos pilotos como consecuencia de la lluvia intermitente que cayó sobre el circuito: su compañero Pierre Gasly pudo terminar en sexto lugar y el alemán Nico Hulkenberg dio la sorpresa al subirse al último escalón del podio por primera vez en su carrera.

Al mismo tiempo, Falvio Briatore, asesor del Alpine y máxima autoridad en el equipo negó los rumores de una posible llegada de Valteri Bottas a la escudería francesa: “No tengo tal información”.

“Una pena que nos estén pasando estas cosas, después de un buen fin de semana que había encontrado un buen ritmo en general”, se lamentó Colapinto al enfrentar a la prensa luego de la frustrante situación.

El argentino iba a largar desde los boxes, ya que el equipo había cambiado algunos elementos de la unidad de potencia del auto. Salió a dar la vuelta previa con neumáticos de lluvia y cuando el reingresó al pit lane para tomar su posición de largada, frenó en su box para cambiar por neumáticos lisos duros, en una búsqueda de dar un golpe estratégico, algo que también hicieron otros pilotos, que le permitiera luego escalar posiciones. Pero no salió de ahí. El Alpine 43 no se movió más.

“La verdad es que no tengo ni idea, no podía salir del box. Todavía están investigando”, contó Colapinto cuando se enfrentó a la prensa. Casi cinco horas después de terminada la carrera, el equipo francés se limitó a decir que “Franco tuvo un problema en la transmisión”.

Ya con el auto en la fábrica, el lunes por la mañana todavía no había ninguna certeza de lo que había ocurrido. “Tenemos todos los datos que nos han dado algunas ideas, pero hasta que no abramos la caja de cambios y miremos dentro no conoceremos toda la información que sabemos que tenemos. Fue una falla muy frustrante”, detalló Pilbeam ante la consulta de Clarín.

Y también lamentó lo ocurrido por la oportunidad que pudo representar el GP de Gran Bretaña: “Es una pena. Ayer hubo una oportunidad, como vimos con Pierre y otros, de puntuar, y es muy decepcionante no haber siquiera empezado la carrera. El ritmo de Franco fue bueno; todo el fin de semana estuvo cerca o por delante de Pierre la mayor parte del tiempo, así que sí, es una pena”.

Justo ese día Colapinto no fue a la fábrica. “Él estará aquí dos días esta semana. No hoy, pero los pilotos suelen venir uno o dos días antes de cada carrera para trabajar en el simulador y pasar un rato con sus ingenieros de carrera repasando lo que acabamos de hacer y lo que haremos a continuación”, precisó el ingeniero.

Pilbeam comentó que “el tiempo de los pilotos es realmente difícil porque tienen que dedicar tiempo con los ingenieros pero también tiene muchos compromisos comerciales, además del entrenamiento necesario para mantenerse en forma para pilotar. Algo de lo que no se habla mucho, es el tiempo de recuperación”.

El británico hizo hincapié en la recuperación mental: “Nunca hablan de eso, pero es duro. Es duro físicamente y la recuperación lleva tiempo. Y no se trata solo del aspecto físico de estar en el auto, sino también del mental. Igual que todos los demás atletas. Es difícil. En muchos deportes se acepta que se necesita tiempo para recuperarse física y mentalmente. Pero con los pilotos de carreras, creo que es menos obvio, al menos para el mundo exterior. También se necesita tiempo para la recuperación mental. Lo que hacen es duro e intenso, y se necesita tiempo para procesarlo”.

Uno de los temas que más agitó a los fanáticos argentinos durante el fin de semana del Gran Premio de Gran Bretaña fue el rumor sobre la llegada de Valteri Bottas, piloto de reserva de Mercedes, a la escudería en la que corre Franco Colapinto.

Entre las conjeturas, se especulaba con los problemas que ha tenido el argentino (muchos de ellos de parte del equipo) para conseguir buenos resultados y la confirmación de que Alpine montará motores de la empresa alemana a partir del año que viene.

De hecho, Toto Wolff, jefe del equipo Merceds, que se reunió con Briatore, confirmó el supuesto interés. “Briatore me contactó varias veces” para charlar sobre Bottas, afirmó el austríaco en declaraciones al medio neerlandés Viaplay. Y agregó: “Hoy mismo (por el sábado) hablé con él sobre Valtteri”. Y reconoció: “Parece que hay un interés acelerado”.

Sin embargo, Briatore salió a contradecir la posible llegada del finlandés a Alpine. “No tengo esa información. Es un buen piloto”, dijo sobre Bottas, “pero ahora mismo tenemos a nuestros propios muchachos. Si cambiamos te lo diré”, dijo el experimentado hombre en la F1 al ser consultado por el medio Motorsport NextGen-Auto.