Con un poco más de aire en la pelea por la permanencia, Alejandro Orfila, entrenador de Gimnasia, sigue afinando detalles en la previa del duelo ante Unión por la octava fecha del Clausura, y la gran duda pasa por la delantera: Norberto Briasco o Jan Hurtado para acompañar a Marcelo Torres. Esa es la pulseada que se libra en Estancia Chica y que mantiene en vilo al técnico.
El dato que llama la atención y que expone el poco poder ofensivo del Lobo durante el año, es que ninguno de los dos delanteros pudo convertir ni asistir en lo que va del 2025. Una estadística que preocupa, sobre todo en un equipo que sufre para generar peligro y que necesita sumar puntos para no complicarse en la tabla de los promedios.
Escasez de gol
El armenio fue el que más cerca estuvo de romper la sequía. Contra Independiente estrelló un remate en el palo y mostró destellos de su mejor versión. Su único gol con la camiseta del Lobo lo había hecho en 2024 frente a Tigre, aunque antes de su lesión dejó buenas sensaciones que lo ubican un paso por encima de Hurtado.
El caso del venezolano es distinto. Desde que regresó al club no pudo festejar. Llegó con el torneo en marcha, le costó agarrar ritmo y encima sufrió una lesión que lo dejó afuera en la previa del Clausura. Durante la pretemporada había mostrado su capacidad goleadora con dos tantos en amistosos, pero recién volvió a sumar minutos la fecha pasada por una lesión. La falta de continuidad se nota y eso le juega en contra en la pulseada.
La lesión de Zalazar complica el panorama ofensivo
Como si la falta de gol no fuera suficiente, Orfila recibió otro golpe en la semana. Maximiliano Zalazar, uno de los refuerzos que había llegado para reforzar el ataque, sufrió una molestia en la práctica y quedó descartado para enfrentar a los santafesinos. El ex Tigre y Boca había arrancado como titular y era una variante más para el frente ofensivo.
De esta manera, el deté pierde una pieza en el sector donde más problemas tiene el equipo. Porque más allá del buen presente de Torres, el artillero del Tripero, Gimnasia apenas convirtió cinco goles en siete partidos del Clausura. Un registro que lo coloca entre los equipos con menos efectividad de todo el 2025.
La falta de gol es un tema central en La Plata. Orfila necesita que alguien levante la mano y acompañe a Torres para que el Lobo empiece a rugir con más fuerza. Y la respuesta puede estar en Briasco o en Hurtado, dos delanteros con cuentas pendientes que ahora tienen la chance de cambiar la historia.