El Departamento de Legales de Independiente, encabezado por el abogado Maximiliano Walker, presentó en Conmebol un recurso de apelación correspondiente a las sanciones dictadas por el organismo que rige al fútbol sudamericano tras los incidentes en el partido del 20 de agosto frente a Universidad de Chile, en el estadio Libertadores de América – Ricardo Bochini.

Si bien el Rojo ya fue descalificado de la Copa Sudamericana, una detterminación que no tiene vuelta atrás, la Comisión Directiva aspira a lograr una reducción de la sanción disciplinaria, que incluye siete partidos sin público tanto de local como de visitante para fututas competiciones internacionales.

También intentarán achicar el monto de la penalidad económica, ya que la Conmebol le impuso al Rojo el pago de una multa de 250.000 dólares.

A Independiente le aplicaron una sanción más importante que a Universidad de Chile porque el Tribunal de Disciplina de la casa matriz del fútbol sudamericano consideró que tuvo más responsabilidad por tratarse del club que organizó el evento deportivo que terminó en dantescas escenas de barbarie sobre la tribuna Pavoni alta, en la que se encontraba la parcialidad visitante.

Más allá de que la U. continuó en la competencia, al club chileno también le aplicaron una sanción de siete partidos de local y visitante si posibilidad de concurrencia para su público. La dirigencia del club trasandino también avisó que va a apelar esa medida.