El recuerdo del histórico 7-0 a Nacional Potosí todavía está latente. La última presentación del primer semestre no hizo más que dejar la expectativa abierta de cara al segundo. Y después de un merecido descanso y una breve preparación, la vuelta de Independiente está ahí nomás: debutará este domingo, a las 20.10, frente a Gimnasia de Mendoza por los 16avos de final de la Copa Argentina, encuentro que se disputará en el Juan Gilberto Funes de San Luis.

El Rojo fue uno de los mejores equipos en la primera etapa de la temporada. Llegó a la semifinal del Torneo Apertura de la Liga Profesional, avanzó a los octavos de final de la Copa Sudamericana, potenció a muchísimos jugadores (Kevin Lomónaco, Felipe Loyola y Álvaro Angulo, entre otros) y volvió a cultivar la ilusión en sus hinchas después de mucho tiempo. Consciente de esa situación, Julio Vaccari sabe que debe dar un pasito hacia adelante para tratar de consolidar lo hecho y buscar concretar un título, el anhelo de los fanáticos, de los jugadores y del propio entrenador.

A pesar de que restan pocos días para el regreso a la actividad, el plantel profesional todavía no está cerrado. Con Walter Mazzantti y Leonardo Godoy como únicos refuerzos hasta el momento, el mercado de Independiente se encuentra en una tensa calma. Los sondeos por varias de sus piezas clave no avanzaron, pero los dirigentes esperan que pueda llegar alguna oferta por Lomónaco y Loyola. A su vez, Álvaro Angulo presiona para abandonar el club y JV continúa pretendiendo jugadores (un defensor central, un lateral izquierdo en caso de que el colombiano emigre y un delantero de área) para darle un salto de calidad al equipo y tener alternativas en momentos de necesidad y con muchos frentes abiertos.

Con el inicio de un nuevo semestre, Independiente cuenta con las esperanzas renovadas y con nuevos desafíos. Continúa con vida en la triple competencia aunque debe asumir la responsabilidad de sacarse el estigma que tiene en la Copa Argentina, competencia en la que nunca logró superar los cuartos de final, instancia en la que llegó en tres oportunidades (en 2019 cayó con Lanús, en 2022 perdió con Talleres de Córdoba y en 2024 fue eliminado por Vélez) pero que nunca logró superar.

Y en la Sudamericana aguarda por rival, ya que se enfrentará en octavos (será en agosto) al vencedor del cruce de playoff entre Guaraní, uno de los rivales en fase de grupos, y la Universidad de Chile, que bajó de la Libertadores.

Y el Rey se quiere copar en el segundo semestre.