El mensaje que bajó Gustavo Quinteros en su presentación como nuevo entrenador de Independiente en la previa del clásico frente a Racing pareciera haber quedado atrás. “No pienso hacer demasiados cambios”, dijo este lunes al mediodía. Sin embargo, las circunstancias lo empujan a modificar piezas clave de su 11 titular. Dos jugadores fundamentales podrían perderse el duelo del domingo a las 15.15 en el Cilindro de Avellaneda.
Dos bajas de peso
Sebastián Valdez, uno de los baluartes defensivos desde su llegada al club a comienzos de esta temporada, encendió las alarmas tras el empate frente a San Lorenzo. El defensor central sintió una molestia muscular en el muslo izquierdo y fue reemplazado en el entretiempo. El cuerpo médico le realizará estudios para conocer la gravedad de la lesión, aunque desde el cuerpo técnico ya asumen que será difícil contar con él para el derbi.
La otra preocupación se presenta en el ataque. Gabriel Ávalos, quien disputó 84 minutos en el empate 1-1 ante el Ciclón en el estadio Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini, terminó con una sobrecarga en la cara posterior del muslo izquierdo. El delantero paraguayo, resistido por parte de la hinchada (fue uno de los principales apuntados en el último duelo), también será evaluado en los próximos días, aunque su presencia ante la Academia está prácticamente descartada.
Las alternativas
Ante este panorama, Quinteros deberá rearmar el equipo. Franco Paredes se perfila como el reemplazante natural de Valdez en la zaga central, mientras que Nacho Pussetto podría ocupar el lugar de Ávalos en la ofensiva. La previa del clásico ya se vive con intensidad, y en el cuerpo técnico saben que el margen de error es mínimo. Lo que parecía un equipo sin muchas variantes ahora exige ajustes forzados.